Los amables señores de BLOGGER han tenido un "problemilla" que ha tenido el acceso cortado durante algun tiempo. Ahora dicen haberlo solucionado, pero ¡OOOOOOOH! La entrada del dia 12 no aparece...Desaparecio por arte de magia, asi que, un dia despues, la repito... ¡Que le vamos a hacer!...
FELICIDADES A MI:
Yo, al igual que Groucho Marx, nací a una edad muy temprana…
No podemos hacer nada… Cada mañana el espejo te muestra lo que el tiempo marca, pero hay que asimilarlo. Simplemente el tiempo sigue su curso y va dejando su huella en nosotros.
Hace 41 años que vivo conmigo mismo, 41 años que veo el mismo rostro por las mañanas. Y ya hace tiempo que las veo, pero hoy en mi cara asoma alguna arruga nueva… otra mas que se une a las demás y a las ya acostumbradas canas. Pero bueno… ¡que más da una arruga más¡ Un día leí una frase, que no recuerdo de quien era, que decía: "Que mis arrugas, sean el mapa de mi vida vivida". Cada una de mis arrugas me dirá lo que he vivido, y cada vez que las vea me sentiré vivo!!
No tengo el mismo cuerpo que hace unos años ( snif, snif ), y por supuesto no es la misma energía de entonces la que ahora tengo, pero aún me siento como un niño que descubre la sensación de correr descalzo por la playa por primera vez o lo divertido que es jugar con barro y meterse en los charcos, o lo divertido que es jugar en un monton de arena y subirse a un árbol.
La edad es cuestión de sentimiento, no de años. Que importa cuantas hojas de calendarios hayas arrancado en tu vida. No deberíamos olvidar que siempre seremos todo lo jóvenes que queramos sentirnos.
Sin duda, en más de una ocasión pienso que el tiempo imparable puede ser mi peor enemigo y que definitivamente, aunque no lo quiera, soy vulnerable a el, pero quizás deberíamos saber que le podemos sacar partido. Por que empiezas a ver las cosas de diferente manera, cambia tu punto de vista, tu manera de pensar y de creer. Ya no vives tanto de castillos en el aire, si no que ya has aprendido, tal vez a la fuerza, a vivir con los pies en la tierra.
Aprecias el presente y asumes el pasado, sabiendo que, a veces, te has puesto una gran armadura para intentar detener las heridas que iban directo a tu alma.
Los años van desfilando y te van poniendo poco a poco en el lugar donde debes estar. Alguien dijo una vez: “Cada cual tiene la edad de sus emociones.
Llegados a este punto, comienzas a hacer un resumen de lo que has hecho y hacia donde está encaminada tu vida, y reconoces tus errores, porque has aprendido a superarlos, y puedes decir: "Pruebas superadas!!". Percibes con mayor claridad tus aciertos y desaciertos (cuantos éxitos y derrotas he tenido, cuanto he aprendido!!)
Y a lo aprendido le sumo las personas que formaron parte de mis años, y sin querer ponerme triste, vuelve a hacerse más latente la presencia de las ausencias; sobre todo aquellas que fueron impuestas por el tiempo… por la vida, o mejor dicho, por la antítesis de esta…
Estoy orgulloso de decir que estoy empezando a vivir mis cuarentaytantos. No, no, no, nada de tenerle miedo a esa edad ni de andar ocultando el paso del tiempo. A mucha honra puedo deciros que hoy cumplo 41 hermosos y divinos años!!!
¡¡¡ Feliz cumpleaños a mí !!!
Saber envejecer es una obra maestra de la sabiduría,
y una de las partes más difíciles del gran arte de vivir.
Henri Fréderic Amiel
FELICIDADES A MI:
Yo, al igual que Groucho Marx, nací a una edad muy temprana…
No podemos hacer nada… Cada mañana el espejo te muestra lo que el tiempo marca, pero hay que asimilarlo. Simplemente el tiempo sigue su curso y va dejando su huella en nosotros.
Hace 41 años que vivo conmigo mismo, 41 años que veo el mismo rostro por las mañanas. Y ya hace tiempo que las veo, pero hoy en mi cara asoma alguna arruga nueva… otra mas que se une a las demás y a las ya acostumbradas canas. Pero bueno… ¡que más da una arruga más¡ Un día leí una frase, que no recuerdo de quien era, que decía: "Que mis arrugas, sean el mapa de mi vida vivida". Cada una de mis arrugas me dirá lo que he vivido, y cada vez que las vea me sentiré vivo!!
No tengo el mismo cuerpo que hace unos años ( snif, snif ), y por supuesto no es la misma energía de entonces la que ahora tengo, pero aún me siento como un niño que descubre la sensación de correr descalzo por la playa por primera vez o lo divertido que es jugar con barro y meterse en los charcos, o lo divertido que es jugar en un monton de arena y subirse a un árbol.
La edad es cuestión de sentimiento, no de años. Que importa cuantas hojas de calendarios hayas arrancado en tu vida. No deberíamos olvidar que siempre seremos todo lo jóvenes que queramos sentirnos.
Sin duda, en más de una ocasión pienso que el tiempo imparable puede ser mi peor enemigo y que definitivamente, aunque no lo quiera, soy vulnerable a el, pero quizás deberíamos saber que le podemos sacar partido. Por que empiezas a ver las cosas de diferente manera, cambia tu punto de vista, tu manera de pensar y de creer. Ya no vives tanto de castillos en el aire, si no que ya has aprendido, tal vez a la fuerza, a vivir con los pies en la tierra.
Aprecias el presente y asumes el pasado, sabiendo que, a veces, te has puesto una gran armadura para intentar detener las heridas que iban directo a tu alma.
Los años van desfilando y te van poniendo poco a poco en el lugar donde debes estar. Alguien dijo una vez: “Cada cual tiene la edad de sus emociones.
Llegados a este punto, comienzas a hacer un resumen de lo que has hecho y hacia donde está encaminada tu vida, y reconoces tus errores, porque has aprendido a superarlos, y puedes decir: "Pruebas superadas!!". Percibes con mayor claridad tus aciertos y desaciertos (cuantos éxitos y derrotas he tenido, cuanto he aprendido!!)
Y a lo aprendido le sumo las personas que formaron parte de mis años, y sin querer ponerme triste, vuelve a hacerse más latente la presencia de las ausencias; sobre todo aquellas que fueron impuestas por el tiempo… por la vida, o mejor dicho, por la antítesis de esta…
Estoy orgulloso de decir que estoy empezando a vivir mis cuarentaytantos. No, no, no, nada de tenerle miedo a esa edad ni de andar ocultando el paso del tiempo. A mucha honra puedo deciros que hoy cumplo 41 hermosos y divinos años!!!
¡¡¡ Feliz cumpleaños a mí !!!
Saber envejecer es una obra maestra de la sabiduría,
y una de las partes más difíciles del gran arte de vivir.
Henri Fréderic Amiel
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