COMO EL AVE FENIX

EDITADO EN HUELVA INFORMACION

Un renovado Niño Miguel reaparece esta noche en el Central de Sevilla

En todas las historias suele haber un antes y un después y, en esta concreta, lo hay por méritos propios: el mito ha decidido salirse de su estela (verdaderamente lo decidió hace tiempo) para pasarse a la realidad. Ahora quiere mostrarlo al mundo y, como consecuencia, un renovado Niño Miguel se sube esta noche a las tablas del sevillano Teatro Central cinco años después de ofrecer su último concierto en el teatro de la Fundación El Monte, también en la capital hispalense.

A partir de las 21:00, quienes hablan en pasado sobre su forma de tocar -es inevitable recordar sus dos laureados discos, lo que hizo junto a Camarón o sus triunfos en los 60, cuando abarrotó las primeras bienales de flamenco- podrán hacerlo en presente y en futuro, puesto que el artista, sorprendente cada vez que coge una guitarra, amenaza con volver a hacer vibrar al respetable.

Los afortunados (el aforo del teatro, que ha sido cedido por el Instituto Andaluz del Flamenco es de 450 personas) que han podido adquirir entradas tendrán una oportunidad única para disfrutar de su guitarra, que se envolverá de la especial acústica de la infraestructura.

Como "él es de pocas palabras", su hijo Ángel se encarga de contar que el artista se siente "muy feliz e ilusionado" y "con muchas ganas" de tocar; una motivación a la que le acompaña la buena salud de la que goza en estos momentos. Con todos estos ingredientes, "lo de mañana (por hoy) va a ser increíble", comenta Ángel.

El anuncio de su reaparición -que provocó que las entradas se agotaran en apenas una semana- ha agitado el mundo del flamenco, que está de enhorabuena. Hasta el punto de que las revistas especializadas han catalogado la vuelta a los escenarios del genio como un acontecimiento "histórico". Según explica Ángel, el onubense -al que Paco de Lucía definió como "la mejor guitarra de todos los tiempos"- es consciente de todo este revuelo y "está muy contento".

El Niño Miguel tiene previsto ofrecer cuatro temas y, después de un breve descanso, otro bloque con cuatro o cinco piezas más, aunque hasta esta noche no se desvelará el misterio y, además, nada puede ser definitivo. Porque la improvisación tendrá un lugar destacado, ya que el estado de ánimo y el sentimiento que en esos momento acompañe al músico influirán en la elección del repertorio.

Miguel Vega de la Cruz (Huelva, 1952) es considerado, a pesar de la inconstancia de su carrera, uno de los grandes intérpretes del flamenco. Aprendió a tocar junto a su padre y siendo un niño ya le acompañaba en el canto en tabernas y las calles de Huelva, cosechando un gran éxito de público y crítica en los Setenta. Obtuvo en 1973 el premio de honor del 'Concurso Nacional de Guitarra de la Peña' Los Cernícalos de Jerez y Televisión Española le dedicó un especial en el programa Raíces.

Durante su carrera grabó dos discos con Universal, La guitarra del Niño Miguel y Diferente (en los estudios Phillips donde grababa Paco de Lucía) reeditados en 1999 bajo el título Grabaciones históricas. El flamenco es universal. Niño Miguel.

A la grandeza de sus composiciones han rendido tributo guitarristas como su sobrino Tomatito y Rafael Riqueni. De su legado musical destacan piezas imprescindibles como el fandango Brisas de Huelva o el vals Lamento, transcritas bajo el título Guitarra gitana. El Niño Miguel.