No es raro, e incluso yo diría que es hasta recomendable, el que de vez en cuando encontremos un momento en el día para intentar viajar con la imaginación a bordo de algunas imágenes.
Quizás tengas a buen recaudo esas imágenes que hacen que halles esos pequeños, pero a la vez inmensos, momentos de tranquilidad. Me refiero a esos breves segundos donde el vello se eriza, donde un placentero escalofrío parte de tu columna para viajar hasta el último rincón de tu cuerpo.
Cuando eso ocurre, la imagen que ves queda grabada y archivada para, posteriormente, ser visitada cuando queramos. Son nuestros Rincones, ese espacio personal, que a veces descubrimos de la mano de una imagen, de un paisaje…
Estas son algunas de esas imágenes que me llevan a mí a “ese otro lado”… estos son algunos de mis “RINCONES”…
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