Hace unos días escuche en radio una pequeña semblanza o "retrato radiofonico" de Mark Twain, y tras escucharlo quise viajar en mis recuerdos.
Recordé aquel fantástico libro que mi tía me regalo por mi comunión; LAS AVENTURAS DE TOM SAWYER; y quise de nuevo sumergirme en los sueños de aventuras de niño; quise volver a sentir aquella despreocupación por casi todo; aquellas tardes de juegos con los amigos, y recordé el olor de los libros nuevos, el olor de una goma de borrar, y quise sentir de nuevo la emoción de un partido de chiquillos, la emoción de una carrera de bicis...
Y en este viaje, vinieron a mi mente algunas imagenes:
Con esta moneda eramos los reyes del mundo. La aprovechábamos a mas no poder.
Eso sí; siempre y cuando no fuéramos a:
Aquí terminaban muchas veces ( siempre que nos dejaran jugar) nuestros ahorros.
Si, son muchas las imagenes que vienen a mi mente... Las tardes en La Dehesa, los días lluviosos en "los estrellas"; los veranos calurosos que pasábamos a base de manguerazos; y alguna que otra visita al kiosko para comparar helados:
Y hablando de kioskos; ¿ te acuerdas de las chucherías de entonces?.....
Nos juntabamos en casa de alguno a escuchar música y a charlar; y casi siempre uno de nosotros llevaba una cinta para grabarse algo de el amigo:
La pelota, el pin-pong, el ajedrez, los juegos de mesa ( monopoly, cluedo, etc), policias y ladrones, la lima, el trompo, los bolinches... Todo era jugar en la calle, o donde fuese. ¿Juguetes?, cualquier cosa nos servia, y si no:
Hasta que aparecio un invento que cambiaria nuestras vidas. Nuestras vidas y la vida de la familia que lo tenía, porque " alla que te ibamos todos" a jugar fuera la hora fuese...
Y si no era con el ATARI era con aquellos míticos relojes de Casio que eran calculadoras y que llevaban un juego "de matar números":
Y al final de aquel viaje imaginario me invadio algo de tristeza por el tiempo que no volvera; aunque se que Tom Sawyer, y su amigo Huck, siempre estaran dispuestos a que les acompañe a espiar al indio Joe; o a perdernos en aquella isla fantastica donde había un tesoro, o a ir a visitar al Tio Tom a su cabaña a lomos del caballo de Bufalo Bill...
Es curioso como sin querer una simple mención de un libro de tu infancia te hace recordar y revivir momentos felices.
Hablando de recordar; os dejo con unas letras que seguro muchos habeis leido ya y que, a mi entender, son verdades como puños.
Nosotros, no estuvimos en la Guerra Civil, ni en mayo del 68, ni corrimos delante de los grises, no votamos la Constitución y nuestra memoria histórica comienza con las olimpiadas del '92. Por no vivir activamente la Transición se nos dice que no tenemos ideales y eso que sabemos de política más que nuestros padres y de lo que nunca sabrán nuestros hermanos pequeños y descendientes.
Somos la última generación que hemos aprendido a jugar en la calle a las chapas, la peonza, las canicas, la comba, la goma, el rescate o el botebote y, a la vez, somos la primera que hemos jugado a videojuegos. Hemos ido a parques de atracciones o visto dibujos animados en color.
Los Reyes Magos no siempre nos traían lo que pedíamos, pero oíamos (y seguimos oyendo) que lo hemos tenido todo, a pesar de que los que vinieron después de nosotros sí lo tienen realmente y nadie se lo dice.
Se nos ha etiquetado de generación X y tuvimos que tragarnos 'bodrios' como: Melrose place o Sensación de vivir, que te gustaron en su momento, pero... vuélvelas a ver, verás que chasco. Somos la generación de El coche Fantástico, de El Super Héroe Americano, De los Fraggel Rock, De "V" o de Mc Giver...Lloramos con la muerte de Chanquete, con la madre de Marco que no aparecía, con las putadas de la Señorita Rottenmayer. Somos una generación que hemos visto a Maradona hacer campaña contra la droga (?), que durante un tiempo tuvimos al baloncesto como el primero de los deportes.
Hemos vestido vaqueros de campana, de pitillo, de pata de elefante y con la costura torcida; nos pusimos bombers sin miedo a parecer Skin Heads. Nuestro primer chándal era azul marino con franjas blancas en la manga y nuestras primeras zapatillas de marca las tuvimos pasados los 10 años.
Entramos al colegio cuando el 1 de noviembre era el día de Todos los Santos y no Halloween, cuando todavía se podía repetir curso. Fuimos los últimos enhacer BUP y COU, y los pioneros de la E.S.O. Hemos sido las cobayas en el programa educativo, somos los primeros en incorporarnos a trabajar através de una ETT y a los que menos les cuesta tirarnos del trabajo...
Siempre nos recuerdan acontecimientos de antes que naciéramos, como si no hubiéramos vivido nada histórico. Nosotros hemos aprendido lo que era el terrorismo, vimos caer el muro de Berlín y a Boris Yelsin borracho tocarle el culo a una secretaria(aparte de aguantar a Jesus Puente en lo que necesitas es amor); los de nuestra generación fueron a la guerra (Bosnia, etc.) cosa que nuestros padres no hicieron; gritamos OTAN no! bases fuera!, sin saber muy bien qué significaba y nos enteramos de golpe un 11 de septiembre.
Aprendimos a programar el video antes que nadie, jugamos con el Spectrum, odiamos a Bill Gates, vimos los primeros móviles(ladrillos) y creímos que Internet sería un mundo libre.
Somos la generación de Espinete, Don Pimpón y Chema el panadero.Los que recordamos a Enrique del Pozo cantando con ganas “Amigo Felix...”). Los mundos de Yupi y las pesetas rubias con la jeta de Franco en algunas de ellas, de los duros y las 25 pesestas con el agujero en medio.
Nos emocionamos con Superman, ET, los Goonies , En busca del Arca Perdida, Regreso al Futuro o Los Cazafantasmas.
Somos la generación del Coche Fantástico, Oliver yBenjí, panky bruster, El show de Benny Hill, La Bola de Cristal, David El Gnomo, Sabadabada y Parchís!!
La generación a la que le entra la risa floja cada vez que tratan de vendernos que España es favorita para un mundial.
La última generación que veía a su padre poner la baca del coche hasta el culo de maletas para ir de vacaciones.
Nosotros viajábamos en coches sin cinturones de seguridad traseros, sin aire acondicionado, sin sillitas especiales y sin air-bags, hacíamos viajes de más de 3h sin descanso con cinco personas apretujadas en el coche y no sufríamos el síndrome de la clase turista. No tuvimos puertas con protecciones, armarios o frascos de medicinas con tapa aprueba de niños. Andábamos en bicicleta sin casco, ni protectores para rodillas ni codos. Los columpios eran de metal y con esquinas en pico.
Salíamos de casa por la mañana, jugábamos todo el día, y solo volvíamos cuando se encendían las luces. No había móviles. Nos rompíamos los huesos y los dientes y no había ninguna ley para castigar a los culpables. Nos abríamos la cabeza jugando a guerras de piedras y no pasaba nada, eran cosas de niños y se curaban con mercromina (roja) y unos puntos y al día siguiente todos contentos. Íbamos a clase cargados de libros y cuadernos, todo metido en una mochila que, rara vez, tenía refuerzo para los hombros y, mucho menos, ruedas!!! Comíamos dulces y bebíamos refrescos, pero no éramos obesos. Si acaso alguno era gordo y punto. Estábamos siempre al aire libre, corriendo y jugando.
Compartimos botellas de refrescos y nadie se contagio de nada. Sólo nos contagiábamos los piojos en el cole. Cosa que nuestras madres arreglaban lavándonos la cabeza con vinagre caliente (o los más afortunados con Filvyt). Y ligábamos con los niños/as jugando a beso,verdad y atrevimiento o al conejo de la suerte, no en un Chat.
Éramos responsables de nuestras acciones y arreábamos con las consecuencias. Sabias que se rifaba una ostia si vacilabas a un mayor. No había nadie para resolver eso. La idea de un padre protegiéndonos si el profe nos pegaba un " chillio" o algun 'pescozon', si haciamos alguna trastada, era inadmisible, si acaso nos soltaba un guantazo o un zapatillazo y te callabas y al dia siguiente calladito a clase!!!!
Tuvimos libertad, fracaso, respeto, éxito y responsabilidad, y aprendimos a crecer con todo ello.
NOS VEMOS EN EL GAZPACHO.
que bueno primo, es alucinante, simplemente buenísimo.
ResponderEliminarGracias "Manué".
ResponderEliminarUn beso.
Por cierto, aunque ya creo que lo sabes, cuando digo que el libro me lo regaló mi tia, me refiero a tu madre...¿ Quien si no?...
ResponderEliminarOtro beso.